Rafting en Brasil, una pasión sin límites

Quiere probar la capacidad de superar desafíos, el espíritu de equipo, la organización, la comunicación y el liderazgo en un grupo de personas? Colóquelas juntas en un bote inflable y haga que ellas enfrenten rápidos provistos apenas de remos. Así es el rafting, modalidad deportiva que está conquistando adeptos en todo el mundo. Una actividad que desafía a sus practicantes a encontrar juntos la mejor forma de transponer obstáculos. Y que, por eso mismo, ha sido frecuentemente utilizada en entrenamientos empresariales tanto en Brasil como en otros países.
Realizado en contacto directo con la naturaleza, el rafting encuentra en el Brasil buenas opciones de locales para su práctica. La hidrografía del país ofrece varios ríos con diversos niveles de dificultad. Hay desde rápidos fáciles, con olas lisas y estables para los principiante, hasta aguas bastante turbulentas que exigen experiencia y habilidad.

Se estima que hoy, cerca de 50 operadoras brasileñas ofrecen itinerarios turísticos dirigidos a la práctica del rafting. En el Estado de San Pablo, es posible aventurarse por los ríos en Juquitiba, Brotas, Socorro y São Luiz do Paraitinga. Ya en el Estado (provincia) de Río de Janeiro, los mejores locales para el deporte son el Parque Nacional da Serra dos Órgãos, Três Rios, Macaé y Visconde de Mauá. La emoción también corre suelta en la Región Sur: en ella están Canela y el Parque Nacional dos Aparados da Serra, en el Estado de Río Grande do Sul; Foz de Iguazú, en el Estado de Paraná; y Timbó y Santo Amaro da Imperatriz, en el Estado de Santa Catarina. Sin hablar de Jalapão, en el Estado de Tocantins; o de Itacaré, en el Estado de Bahia; entre muchos otros.
El rafting es, sin lugar a dudas, otra opción más para venir de vacaciones a Brasil.

Ver:
- Curitiba, una ciudad que crece
- La Garganta del Diablo
- Bombas y Bombinhas, capital brasileña del buceo
- Angra Dos Reis
- Un turista en la red